Ya han pasado tres años desde que preguntamos a 1.000 empresas, una sencilla cuestión, ¿Por qué una empresa decide seguir imprimiendo sus facturas si externalizarlo es más económico?, que choca directamente con otra realidad que son los diversos estudios sobre los ahorros en la optimización del proceso de facturación en cada compañía, donde la factura electrónica tiene especial mención.
Hemos dejado pasar unos cuantos años para ver si hemos cambiado mucho, y si todas las arengas y consignas sobre las bondades de la eliminiación de tareas improductvas en la facturación y la eliminación del papel han surtido efecto. Hoy hemos publicado los datos de 2017, ¿quieres conocerlos?