Singapur: primera región asiática en hacer uso de PEPPOL
Singapur fue pionero en la implementación del uso de la factura electrónica no solo en Asia, sino en todo el mundo. Fue en 2003, el mismo año que Chile, cuando en este país asiático comenzaron a utilizarse las facturas electrónicas. No obstante, han tenido que pasar muchos años para que se diese un primer paso hacia la obligatoriedad. De hecho, sería normal pensar que, después de 17 años, la factura electrónica estuviese normalizada en Singapur, pero la realidad es bastante diferente.
Por lo general, se estima que una gran empresa en Singapur emite una media de 2 millones de facturas en papel anuales, lo que equivaldría a la altura del Marina Bay Sands, el edificio emblemático de la ciudad. Hoy en día, a pesar de las grandes ventajas que ofrece, el uso de la factura electrónica no es algo habitual entre las empresas privadas.
Según datos facilitados por la Infocomm Media Development Authority (IMDA), el 80% de las compañías del país todavía no han realizado avances en su transformación digital, lo que explicaría que el uso de la factura electrónica no sea común en las transacciones comerciales en el ámbito B2B. Algo que podría cambiar próximamente debido a que uno de los principales problemas a los que se enfrentan las pequeñas y medianas empresas es la falta de liquidez. Según SPRING Singapore, tres de cada cinco PYMES experimentan retrasos en la recepción de pagos por parte de sus clientes.
Obligatoriedad en el Sector Público
Atraído por los beneficios que reporta la factura electrónica a la fiscalidad estatal, el gobierno de Singapur comenzó, en 2008, a impulsar su uso entre las Administraciones Públicas. El culmen de este proceso llegó en 2018, cuando se hizo efectiva la obligatoriedad de envío y recepción de e-facturas entre los organismos públicos y sus proveedores.
Este hecho contrasta con que, a día de hoy, todavía no exista una legislación en vigente sobre la facturación electrónica en el ámbito de la empresa privada. No obstante, se espera que la obligatoriedad en el sector público genere un efecto bola de nieve en el tejido empresarial del país, y la factura electrónica sea cada vez más utilizada por las compañías.
PEEPOL: hacia la estandarización de la e-factura
En 2019, Singapur adoptó el formato de factura electrónica PEPPOL, convirtiéndose, de esta manera, en el primer país de fuera de Europa en sumarse a esta red. El uso de PEPPOL facilita en gran medida las transacciones internacionales y con toda Europa.
Singapur es el principal socio comercial de Europa en el continente asiático y, entre otros muchos motivos, la facilidad para realizar actividades comerciales con el viejo continente ha sido una razón de peso para unirse a PEPPOL.