La implementación de la factura electrónica desempeña un papel fundamental en la digitalización de los países. Su creciente adopción se ha convertido en un fenómeno global que ha experimentado un significativo impulso en la región de Oceanía en los últimos años.
En algunos casos, este crecimiento se debe a regulaciones gubernamentales y leyes, mientras que, en otros, las propias empresas han optado por su adopción voluntaria. En última instancia, la factura electrónica se ha convertido en una herramienta esencial con beneficios notables, para cualquier entidad que la emplee.
En el siguiente artículo, presentamos una visión detallada de la situación actual y los avances previstos sobre la factura electrónica en países como Australia, Fiyi y Nueva Zelanda.
El Departamento del tesoro australiano (Australian Department of Treasury) sigue muy enfocado en impulsar la adopción de la facturación electrónica B2B siguiendo el formato BIS Billing 3.0 basado en PEPPOL. De hecho, en las transacciones B2G es obligatorio desde el año 2022.
Actualmente se han marcado el objetivo de establecer una serie de regulaciones para que sus clientes empresariales residentes acepten la facturación electrónica a través de PEPPOL.
El cronograma preestablecido es el siguiente:
Como primer paso para la obligatoriedad de la factura electrónica entre empresas y gobierno (B2G), a partir del 31 de marzo de 2022 todos los organismos de la Administración Central del gobierno neozelandés deben estar preparados para recibir facturas electrónicas.
Se espera que, para julio de 2026, el 90% de las facturas enviadas a la Administración sean electrónicas. Sin embargo, no se ha proporcionado información adicional ni las fechas exactas para implementarlo.
También se planea, en un futuro cercano, establecer la obligatoriedad de la facturación electrónica a través de PEPPOL para las transacciones entre empresas (B2B). Para ello, el gobierno llevará a cabo una consulta para poder aplicar esta medida de la mejor manera posible. Aun así, no se ha confirmado un calendario exacto ni la forma en que se llevará a cabo el sistema de facturación.
Como últimas novedades, el Servicio de Impuestos y Aduanas de Fiyi ha implementado un enfoque escalonado para aplicar la obligatoriedad de emplear dispositivos fiscales electrónicos (EFD) a diversos sectores y contribuyentes.
Inicialmente, la obligación de usar EFD estaba programada para ser aplicada a todas las empresas a partir del 1 de enero de 2024. No obstante, se ha anunciado en el presupuesto del año 2023/2024 que se llevará a cabo una pausa en la implementación de EFD mientras se revisa el sistema en su conjunto.
Además, se otorga un incentivo a las empresas que decidan implementar el EFD antes del 31 de diciembre de 2023, en forma de una deducción del impuesto de sociedades del 300% basada en los gastos relacionados con la implementación. Es importante tener en cuenta que esta medida no impone el uso exclusivo de pagos electrónicos.