El gobierno francés va a dar un paso más hacia la digitalización de los intercambios comerciales con la generalización de la facturación electrónica, lo que mejorará la competitividad de las empresas al optimizar los plazos de pago y racionalizar los circuitos de facturación. Esta medida también facilitará las relaciones entre las empresas y la administración fiscal.
En un comunicado de prensa realizado el 15 de octubre, la DGFiP anunció su intención de implementar la factura electrónica B2B en Francia a través de un modelo de 5 esquinas. Esto supone que las empresas deben utilizar una PDP (Plateformes de Dématérialisation Partenaires) para emitir, transmitir y recibir facturas electrónicas. A su vez, la administración acompañará esta transición en colaboración continua con plataformas, federaciones y desarrolladores de software, reafirmando su compromiso con la digitalización de las relaciones empresariales.
Por lo tanto, el papel de la PPF (Portail Public de Facturacion) quedará limitado a gestionar un directorio y a recoger datos de las PDP.
Actualmente, más de 70 plataformas de desmaterialización han sido aprobadas por la Dirección General de Finanzas Públicas (DGFiP). Aunque la idea original era crear una plataforma pública de emisión y recepción de facturas accesible para todos los usuarios, su funcionamiento estará limitado. Cada empresa será identificada mediante su número SIREN/SIRET. Además, se garantizará la identificación e interoperabilidad entre empresas a través de una Plataforma de Digitalización Asociada (PDP).
El Estado confía en que estas plataformas garantizarán servicios seguros y de calidad, y seguirá avanzando en la creación de un directorio de destinatarios y un sistema centralizado de transmisión de datos a la administración pública. Esto incluye la gestión del flujo 1 y el reporte fiscal electrónico, que agrupa los datos necesarios para el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
Según la ley de finanzas de 2024, la implementación de la factura electrónica obligatoria en Francia será gradual. A partir del 1 de septiembre de 2026, todas las empresas deberán poder recibir facturas electrónicas y tanto las grandes como las medianas empresas, estarán obligadas a emitirlas. Un año después, el 1 de septiembre de 2027, esta obligación se extenderá a las pequeñas y a las microempresas.
De acuerdo con lo establecido en la normativa, estarán obligados a hacer uso de la factura electrónica todas aquellas compañías que tengan domicilio fiscal en el país.
No obstante, en la Ordenanza se especifica que estarán exentos de presentar facturas en formato electrónico todos aquellos contribuyentes que se beneficien de una exención del IVA. Según el Artículo 261 del Código General Tributario, estos son los operadores prestadores de servicios de salud, prestadores de servicios educativos y las entidades sin ánimo de lucro, entre otros.
Con el objetivo de facilitar al máximo su implementación en las empresas, y al igual que ha sucedido en otros países, se ha diseñado un calendario de obligaciones para la factura electrónica en Francia.
Durante el mes noviembre de 2024, se seleccionarán candidatos beta para que formen parte de las PDP (Plataformas de Desmaterialización de Socios). Es decir, aquellos proveedores de servicios de facturación electrónica acreditados). A la par comenzará la prueba piloto del PPF (Portal público de facturación) y en diciembre se revisarán las condiciones específicas.
En enero de 2025 comienza la fase piloto de los PDP y ya en el mes de marzo, todas las PDP se podrán unir a la prueba. Durante los meses de octubre y diciembre se realizarán test de interoperabilidad y todas las PDP deben estar registradas. Justo un año después, se ejecutarán pruebas completas de las funcionalidades de las PPF con la API sandbox.
A partir de septiembre de 2026, comenzará la obligación de facturación electrónica B2B y presentación de informes electrónicos para las grandes empresas (> 5.000 empleados y > 1.500 millones de € de facturación / > 2.000 millones de € de balance) y también para las medianas. No obstante, hay posibilidad de extenderlo 3 meses (hasta diciembre de 2026).
Y, finalmente, en septiembre de 2027 se extenderá la obligatoriedad de facturación electrónica B2B y presentación de informes digitales para las pequeñas empresas y microempresas (menos de 250 empleados; y que no superen los 50 millones de € de facturación; o 43 millones de € de balance). También existe la opción de extenderlo otros 3 meses.
La factura electrónica en Francia en el sector público comenzó en 2017 y se completó en apenas tres años. A partir del 1 de enero de 2020, todas las empresas francesas tenían la obligación de enviar facturas electrónicas a las Administraciones Públicas.
Por otro lado, en septiembre de 2021, el Gobierno decidió ampliar la obligatoriedad de uso de esta entre las empresas privadas a través de la Ordenanza n.º 2021-1190.
En paralelo a la masificación de la factura electrónica en Francia, y de acuerdo con la Ley de Finanzas para 2022, el Gobierno también ha decidido implementar un proyecto de reporte fiscal electrónico.
El objetivo es combatir el fraude fiscal y, según lo especificado en la Ley, se deberán declarar de forma electrónica en los siguientes casos:
La mejor forma de cumplir con obligatoriedades a nivel internacional es a través de la contratación de una solución de factura electrónica global que esté certificada en todos los países en los que opera tu empresa.
Con la implementación de la solución e-Factura Multipaís de SERES, las empresas podrán beneficiarse de una serie de ventajas: