La firma digital ha entrado con fuerza en el sector de las telecomunicaciones, especialmente, entre los proveedores de telefonía móvil y de acceso a Internet. En ambos casos, el canal de venta online es cada vez más relevante.
Además de simplificar tareas burocráticas y redundantes, y eliminar el uso del papel, la firma digital acelera los procesos de venta y contratación y mejora la experiencia de los clientes.
Gracias a ella se pueden automatizar y agilizar tareas como la contratación de servicios, la actualización de tarifas y condiciones, la aceptación de presupuestos, la formalización de citas previas e inspecciones, la reclamación de impagos y los mandatos SEPA.
La gestión de las empresas de telecomunicaciones ha cambiado mucho en los últimos años. Se prevé que, en los próximos años, se reduzca la cantidad de los puntos de venta y de atención al cliente físicos y las compañías se enfoquen en ofrecer una experiencia omnicanal.
A pesar de que ser un sector que ha avanzado enormemente en competencias digitales en los últimos tiempos, todavía maneja una cantidad importante de documentos en papel, lo que requiere dedicar mucho tiempo y recursos a la verificación de la información enviada y recibida.