Se suele decir que el tiempo es relativo. Algo totalmente aplicable al proceso de facturación en tu empresa. En el papel pone que debes cobrar 30 días, pero ya han pasado 90 - con suerte - desde que emitiste la factura hasta que la has cobrado. Lo cierto es que el plazo varía dependiendo del sector o la comunidad autónoma en la que tu empresa realiza su actividad pero, de media, el 55 % de los negocios en España sufre impagos.
La zona geográfica en la que operes ya influye en el PMC de tu negocio. Tal y como se muestra en un estudio de Informa, Ceuta y Melilla son los territorios en los que más se alarga el período medio de cobro, con hasta 30 días de retraso. Por el contrario, El País Vasco y Navarra son las comunidades con menor RMP (retraso medio de pago), pero aún registran más de 10 días de demora.
De hecho, si tus clientes son de la administración o del sector hotelero, es probable que tengas que adelantar tu dinero hasta 24 días más de lo previsto, pues el retraso medio de pago es más largo en estas empresas. Estás de suerte si tu deudor se dedica a la comunicación o los servicios, que tienen un índice de puntualidad relativamente bueno: se demoran 12,84 días más de lo establecido. Días que, pese a todo, suponen un gasto para tu compañía.
Si bien es cierto que el retraso en los pagos es una realidad en nuestro país, sí hay algo que puedes hacer al respecto. Uno de los grandes errores es descuidar las facturas una vez se envían y confiar en que el cliente las pagará a tiempo. Ante esto, asume un rol proactivo y asegúrate de que dicho cobro llega en el plazo establecido. Puedes apoyarte en la tecnología, es tu gran aliado.
De esta manera se acaban las excusas. Ya no vale que un cliente diga que no la ha visto, pues quedará constancia de si lo ha hecho o no. Ni siquiera que no estaba de acuerdo con algún campo del documento, dado que habrá tenido que firmar, en plazo, si está conforme o disconforme con el contenido de la factura.
La digitalización y automatización de los procesos puede significar un cambio relevante en el período medio de cobro de tu empresa. De momento, el PMC no parece que vaya a disminuir a nivel nacional, al contrario, pero esto cuesta mucho dinero a las empresas (en 2018, alcanzó los 1.791 millones de euros). A tu favor, hay herramientas para ponerle remedio y evitar el impago. Así, la próxima vez que te pregunten: “¿cuánto tardas en registrar las facturas?”, tu respuesta será: “Exactamente, lo que acordé con mi cliente”.