Es la guía perfecta para conocer a qué se enfrenta su empresa si quiere utilizar la factura electrónica de forma global.
El gobierno de Hungría lleva impulsando la digitalización en los organismos públicos del país desde hace varios años, y la introducción de la factura electrónica es un paso fundamental dentro de este proceso. Para ello, se escogió a la Administración Nacional de Impuestos y Aduanas (NTCA) como el organismo encargado de la puesta en marcha del modelo de facturación electrónica en el país.
Además de la obligatoriedad marcada para las autoridades centrales húngaras, las empresas privadas cuyo IVA supere los 100.000 HUF (alrededor de 320€) están obligadas a presentar sus facturas en formato electrónico a través del sistema NAV (Nemxeti Adó-és Vámhivatal). Los obligados deben enviar las facturas en un plazo máximo de 5 días o, incluso, de 24 horas, en función de los bienes que se declaren en las facturas.
A partir de abril de 2020, la Administración Nacional de Impuestos y Aduanas de Hungría obligará a todos los contribuyentes a utilizar la versión 2.0 del formato XML. Para asegurarse de que la transición hacia este nuevo modelo se realiza de manera exitosa, en octubre de 2019, la NTCA puso en marcha un entorno de prueba para la versión 2.0.
Es la guía perfecta para conocer a qué se enfrenta su empresa si quiere utilizar la factura electrónica de forma global.