Es la guía perfecta para conocer a qué se enfrenta su empresa si quiere utilizar la factura electrónica de forma global.
En relación a los requisitos para el uso de facturas electrónica, El Servicio de Impuestos Federales ruso establece que deben emitirse en formato XML y que siempre deben ir acompañadas de una firma electrónica que verifique su autenticidad. Adicionalmente, las empresas que decidan facturar electrónicamente, deben certificar ante las autoridades fiscales que pueden garantizar el almacenamiento de las facturas durante un mínimo de cuatro años.
Desde el 1 de julio de 2017, los comercios de minoristas rusos están obligados a utilizar cajas registradoras certificadas. De esta forma, todas las transacciones B2C se comunican en tiempo real con las autoridades fiscales a través de un operador electrónico de transmisión de datos.
Desde enero de 2020, se requiere el control y seguimiento de todos los productos farmacéuticos que estén en circulación en Rusia. El objetivo principal de esta medida, recogida en la Ley Federal N.º 425-FZ, es evitar la falsificación de dichos productos.
La normativa fue aprobada en 2017 y, hasta su entrada en vigor, ha ido pasando por varias etapas. En 2018, se puso en marcha un plan piloto con varias empresas participantes, cuya finalidad era probar la fiabilidad y eficacia de este nuevo sistema.
Las interacciones deben llevarse a cabo en tiempo casi real y utilizando ficheros XML debidamente sellados con una firma electrónica especializada. Este proceso involucra a todas las partes en la cadena de suministro: fabricantes farmacéuticos, importadores, empresas de logística y dispensadores. De esta manera, todos los productos están contabilizados, desde la fabricación hasta el suministro.
Es la guía perfecta para conocer a qué se enfrenta su empresa si quiere utilizar la factura electrónica de forma global.