Inventor, político, científico… A Benjamin Franklin se le recuerda por muchas cosas, buena parte de ellas, relacionadas con la fundación de los Estados Unidos. Como es costumbre con figuras tan célebres, se le han atribuido muchas citas, como la siguiente, que todo director financiero debería tener en mente (si no le viene de serie con el cargo): "si quieres saber el valor del dinero, trata de conseguirlo prestado".
No sería extraño que Franklin fuera realmente el autor; no en vano, aparece en los billetes de 100 dólares. Bromas aparte y sea esta una frase apócrifa o no, lo cierto es que encierra una verdad capital y que todos conocemos: la financiación no crece en los árboles. Cuesta mucho conseguirla y el crédito es una herramienta a la que se debe acceder con cautela.
Muchas empresas se centran exclusivamente en los beneficios y descuidan los recursos invertidos para conseguirlos, sacrificando la tesorería. Vender mucho no significa necesariamente que se tenga una gran liquidez: si se factura mucho y el margen es escaso, los días de la empresa pueden estar contados.
Grandes compañías se han enfrentado a problemas de financiación y la necesidad de recurrir a créditos para ganar liquidez y poder seguir adelante. Deben servir como ejemplos para hacernos recapacitar sobre la importancia de la liquidez y de actuar con precaución.
Concluir un proyecto en plazo y con la calidad prometida ya es suficiente por sí solo, pero, tras este, comienza otro igual de sacrificado y necesario: el seguimiento y cobro de las facturas emitidas. Muchas empresas dedican una gran cantidad de recursos económicos, personal y tiempo a ello. No es para menos, ya que prolongar el Periodo Medio de Cobro (PMC) puede suponer menos liquidez a final de año. O, a la inversa y en positivo: reducir el PMC puede llegar a suponer prescindir de un crédito para financiar un nuevo proyecto.
Imaginemos que una compañía factura unos 7 millones de euros y, por tanto, algo más de 19.000€ de media cada día. Si esta empresa, digamos, consigue reducir su PMC 7 días de media, a comienzos del próximo año podría tener en torno a 133.000€ más en su tesorería, cerca de una cuarta parte de su facturación mensual. Es un ejemplo muy simple, pero sirve para hacerse una idea de la importancia de luchar por reducir ese PMC. Cuando se trata de cobrar en plazo, cada día cuenta.
En SERES, hemos recopilado algunos de los estudios más destacados en el sector sobre el PMC, la liquidez y los pagos tanto en España como fuera de ella. ¿Quieres conocer las conclusiones? Descárgate el informe.