La facturación electrónica es la forma más rápida y eficiente de enviar facturas. Pero ahora, se está convirtiendo en una necesidad empresarial.
En América Latina, la facturación electrónica es una de las herramientas principales para evitar el fraude y la evasión fiscal. Se ha convertido en una obligatoriedad en muchos países y en otros se está implantando de forma escalonada.
Hoy en día, vemos cada vez más países que implementan sistemas de facturación electrónica que se integran con otros softwares empresariales, como los sistemas de contabilidad o adquisiciones. De hecho, muchos países latinoamericanos han implementado estos sistemas y los utilizan a diario. La facturación electrónica ha ganado terreno en Latinoamérica en los últimos años y adquirirá una relevancia significativa a lo largo de 2023.
Así ha sido su evolución en el último año
Los pioneros en su uso son Chile, México y Brasil, que han servido de sendas para otros países como Costa Rica o Ecuador. El objetivo es facilitar tareas a los contribuyentes reduciendo costes.
México: la factura electrónica mexicana creada en 2004 lleva años experimentando evoluciones para garantizar una mejor experiencia de uso. Así desde enero de 2022 está en vigencia el CFDI 4.0 que busca adaptarse a las nuevas necesidades de los contribuyentes. De acuerdo con el artículo 29 del Código Fiscal de la Federación, todos los contribuyentes están obligados a emitir comprobantes fiscales.
Costa Rica: el proceso de expansión de la facturación electrónica en Costa Rica se inició a comienzos de 2019 mediante un calendario de obligatoriedad por grupo de contribuyentes. En la actualidad, casi el 100% de los contribuyentes están obligados a facturar electrónicamente.
Ecuador: EL SRI a través de la Resolución No. NAC-DGERC-GC18-00000191, estableció un calendario de adhesión progresiva para los contribuyentes según su facturación y tipología pero desde el 30 de noviembre de 2022 la factura electrónica es obligatoria en todo el país.
Uruguay: en 2016 la DGI expuso el calendario de obligados a facturar electrónicamente, habiendo terminado éste en diciembre de 2022.
Perú: la Superintendencia de Aduanas y Administración Tributaria (SUNAT) emitió la Resolución de Superintendencia nro. 117-2022, que nuevamente aplaza el plazo de 3 días para el envío de facturas electrónicas y sus correspondientes notas electrónicas a la SUNAT y al OSE (Operador de Servicios Electrónicos) hasta el 1 de enero de 2023.
Colombia: en 2021 se pone en marcha la adopción de la nómina electrónica y la plataforma RADIAN para el registro de facturas electrónicas de venta con título de valor, por lo tanto, todos aquellos que expidan factura electrónica de venta, así como notas de débito y crédito de acuerdo con la clasificación de la DIAN, están obligados a emitir factura electrónica.
Panamá: desde el 30 de Julio de 2022, se obliga a todas las entidades públicas a recibir únicamente factura electrónica emitida por PAC.
Bolivia, El Salvador, Honduras y República Dominicana: se han sumado a esta tendencia de implantar de forma masiva la factura electrónica con la intención de fortalecer el cumplimiento tributario. La implantación en dichos países está siendo de forma gradual pero se prevé que en poco tiempo sea obligatoria.
Venezuela, Barbados, Bahamas, Nicaragua, Antigua y Barbuda, Trinidad y Tobago, San Vicente y Las Granadinas, Puerto Rico y Santa Lucía: queda mucho para que la factura electrónica sea de carácter obligatorio aunque exista la posibilidad de utilizarla de manera voluntaria.
La facturación electrónica se ha convertido, sin duda alguna, en un elemento esencial en el proceso de transformación digital de los países de Latinoamérica por los beneficios que supone y por la efectividad comprobada.
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