10 países cuyas empresas son más puntuales al pagar sus facturas
No solo hay malos estudiantes. Existen aquellos que entregan los deberes y trabajos puntualmente. Que se saben al milímetro la lección y que contribuyen a que el ambiente en clase sea el mejor para todos los compañeros. En el ámbito financiero, el equivalente es el de aquellas empresas que pagan a tiempo. Pero, ¿en qué países se respetan más los períodos fijados por la ley? Hacemos un repaso.
En un post anterior, vimos que China y Grecia ocupan, para su desgracia, el último y penúltimo puesto en todo el mundo en rapidez de cobro por parte de sus empresas. El bronce se lo disputan Italia y Turquía, pero no podemos darnos por satisfechos a nivel local… Justo detrás va España, el cuarto país a nivel global cuyas empresas tardan más en cobrar.
Pero no está todo perdido: pueden pedirles los apuntes a los alumnos aventajados.
Nueva Zelanda: el “empollón” de la clase, seguido de cerca por los países del norte de Europa
La media global de tiempo que las empresas tardan en cobrar es de 66 días. Es sorprendente que, en el caso de Nueza Zelanda, la media esté casi un mes por debajo: 43 días. En el segundo puesto empatan Austria y Dinamarca (47 días), seguidos de Países Bajos y Finlandia (50 días).
Fuente: Payment Behavior 2018, Euler Hermes
¿Te ha llamado algo la atención? De los 5 mencionados, 2 son nórdicos. No es de extrañar cuando estos son los que, según Billentis (International Market Overview & Forecast, enero de 2019), mayor penetración tienen en cuanto a facturación electrónica. También son de los más avanzados en acceso a internet y más concienciados con la sostenibilidad y el ahorro de la dependencia del papel, un lastre para los procesos de facturación.
Y es que, precisamente, la facturación electrónica es una herramienta clave para los “alumnos aventajados” porque:
- Permite reducir la carga de trabajo de los equipos financieros: la automatización de procesos tediosos libera a los profesionales para dedicarse a tareas estratégicas y tener más tiempo.
- Otorga control total sobre la información: la trazabilidad da una tranquilidad imposible de obtener con el papel y envíos postales. De esta manera, las facturas no quedan olvidadas en un cajón, llegan a quien tienen que llegar, se pueden rescatar fácilmente…
- Es un paso más hacia la digitalización de la empresa: nadie duda ya de la importancia de la transformación digital de las empresas. Pero esta debe llegar a todos los rincones de la compañía, y la facturación es uno de tantos procesos a los que llevar esta revolución. Hoy, no tiene sentido que un departamento tenga un nivel de digitalización distinto: todos deben remar en la misma dirección.
Obviamente, las cifras del ranking no solo dependen de la facturación electrónica, pues hay elementos regulatorios y hasta culturales que influyen en los resultados. Pero, sin duda, optimizar el proceso de cobro mediante tecnología es esencial, si tenemos en cuenta que cerca del 50% de los retrasos en los cobros de facturas se producen por motivos evitables con procesos digitales, tales como envíos a destinatarios incorrectos o errores en la cantidad o dirección postal. La trazabilidad, el seguimiento digital y la automatización de avisos, por ejemplo, atajarían estos casos.
¿Tú también quieres tener los deberes hechos? Hemos recopilado un informe con diversas fuentes donde puedes consultar el estado de cada país, tendencias, y mucho más. ¡Descárgatelo!